Los retos y metas están presentes en la agenda del director del Sistema Penitenciario (SP), Nicolás García Fuentes,  quien ha trazado su ruta de trabajo bajo el respeto a  las normas constitucional y sustantiva encaminada con la aplicación de ejes enfocados a mejorar las acciones de un sistema carcelario cuestionado, pues reconoce que  el hacinamiento,  así como la superpoblación generan conductas negativas, la saturación de varios servicios y el desgaste de la convivencia entre los privados de libertad.

Dichos ejes se encaminan a una solución realista de reforma para las prisiones y son:

  • Lucha frontal contra la corrupción en penales.
  • Elaboración y funcionamiento de control de seguridad en centros carcelarios.
  • Transformación de proyectos rehabilitadores para el privado de libertad.
  • Transparencia en la gestión administrativa y financiera para mejorar los resultados de       la actual administración.
  • Dignificación del recurso humano penitenciario.
  • Generación de capacitaciones actualizadas y fortalecimiento de la Escuela de Estudios Penitenciarios con el acompañamiento y  apoyo de  cooperación internacional.
  • La reinserción social de los privados de libertad.

En este sentido, es importante la aplicación de la Política Nacional de Reforma Penitenciaria, para una promoción de la paz social que involucra a varios sectores de la sociedad pero también el importante aporte de la comunidad internacional, una piedra angular en este inicio de proceso de transformación de un sistema de presidios que es parte integral dentro del mecanismo estatal por la importancia de la seguridad interna del país.